Muchos de los gastos que hacemos diariamente fuera de nuestro presupuesto, ya sea porque se nos antojo algo, o porque nos surgió algo de imprevisto y tenemos que gastar, son las principales fugas de capital en las finanzas personales que llegan a ascender a los 20 mil pesos anuales.
A decir del director de Ventas de Principal Afore, Alan Gómez, la falta de control en los llamados gastos fuga u hormiga son los que forman parte de nuestra vida diaria como comprarnos un café, galletas, cigarros, botana, dulces, refrescos y propinas que afectan indirectamente a la economía de las personas.
A través de un reporte, destacó que estos gasto si se administraran podrían hacer accesibles unas vacaciones o proyectos importantes a un corto plazo.
El director de Ventas ejemplificó que una caja de cigarros cuestan 45 pesos, representado un gasto al mes de 360 pesos, al año ascendería a cuatro mil 320 pesos, y con un acumulado en cinco años de 24 mil pesos (si se consume una a la semana).
Sin embargo, dijo, si ese dinero fuera invertido el resultado en un plazo de cinco año sería de 33 mil 242.29 pesos, y a un plazo de 10 años, esos recursos llegarían a 94 mil 448 pesos.
El directivo refirió que al comprarnos un café el gasto en un año podría oscilar los cuatro mil 800 pesos al año, el uso de taxis por falta de tiempo de tres mil 840 pesos, propinas por mil 440 pesos, cuatro mil 800 pesos por botanas de mediodía, mil 200 pesos por boleadas de zapatos, 960 pesos en revistas y tres mil 600 pesos de manicura, entre otros.
Asimismo, agregó que se debe hacer una planificación financiera de todo nuestro sueldo para destinar el dinero, para el ahorro, para el retiro e incluso para no privarse de realizar lo que más nos gusta.Alan Gómez recomendó saber diferenciar entre los gastos de ocio contabilizados en un presupuesto mensual (entretenimiento familiar, ropa, celular, comida, gasolina o transporte) y los gastos fuga de los cuales se puede prescindir regularmente o recortarlos. “No se trata de suprimir los rubros que le dan gusto a la vida, simplemente que sin un buen control.
Se deben anotar los rubros en los que se suele gastar y una lista de lo que se puede recortar o eliminar, pero sobretodo analizar si esos recursos se pueden ahorrar e invertir”, dijo.
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